Si algunas vez has probado las nueces de la India, no me dejarás mentir que son uno de los manjares más deliciosos en cuanto a semillas se trata. Yo he sido fan y adicta de ellas de toda la vida, pero resulta que antes las consumía a través de esas latas gigantes que te venden en los supermercados donde traen cosas importadas, y claro, sabían deliciosas porque están bañadas bajo una cubierta grasosita y salada de la cual nadie se puede negar… #lasodio #porqueamídios #aquenopuedescomersolouna
Resulta que ahora que estoy tan medita en la onda de buscar y consumir productos orgánicos, llegó a mis manos un sobrecito de las nueces de la india de PLACERES ORGÁNICOS. A diferencia de las nueces comerciales, éstas tienen menos grasa y por supuesto están libres de sal y conservadores, los cuales contiene contienen las anteriores, que aunque muy deliciosas, en lo personal eran las causantes de cientos de granitos y una ansiedad por comer algo gordo que solo se curaba con ellas 🙁
Cuando probé esta nueva opción orgánica la verdad es que me sorprendí. Las llevé como botanita para un picnic al que fui con mi mejor amiga, y no sabes qué delicia, aparte las acompañamos con arándanos y vinito tinto y qué bárbaras ¡yummi!
Pero después de ese día no quise quedarme solo con su rico sabor, así que me puse a investigar qué otros beneficios tenían y esto fue lo que descubrí:
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Como dato curioso debes saber que las nueces de la India, no son de la India, provienen de un árbol con un nombre científico tan raro que me equivocaría al escribirlo aquí, la cosa es que se da al sur de Asia y en países como Brasil, este árbol puede crecer hasta 25 metros y la semilla se da dentro de una nuez redonda, porque en realidad las nueces de la India son las semillas de esta nuez redondita ¿entonces por qué les llaman nueces? ush.
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Muchos dicen que su consumo es dañino porque el aceite que contiene de forma natural es tóxico y porque puede ocasionar una pérdida importante de potasio. La realidad la nuez de la india no causa ningún daño, siempre y cuando no consumas cantidades exageradas o muy seguido. Si consumes de más, puedes tener un efecto laxante bastante fuerte y ahí es donde vienen la pérdida de muchos nutrientes y sales, es por eso que muchas personas la usan para bajar de peso, pero ¡tú no lo hagas! ésta no es su función.
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No todo es malo con estas semillitas tan deliciosas. Además de que saben deli, si las combinas con frutos secos como arándanos o pasitas, si la mezclas con ensaladas o las usas como colación, tienen valores nutricionales importantes: contienen calcio, Vitamina C, Hierro, Magnesio y algunos gramos de proteína. Además son buenas para disminuir la ansiedad por comer, el estreñimiento, la celulitis y el colesterol.
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Como dato, una porción de nuez de la india (aproximadamente 28 gramos) te aportan 155 calorías, 12 g de grasa, 9 g de carbohidratos, 5 g de proteína, 2 g de azúcar, 1 g de fibra y 0 mg de colesterol, así que son bien nutritivas, solo no abuses de ellas.
Yo la verdad es que las amo, pero trato de consumirlas con mesura, acompañadas de otro superfood para balancear su contenido y siempre busco las que son orgánicas, para que no estén doradas con más aceite, ni cubiertas con sal. Mis favoritas son las que venden en la tiendita online de Placeres Orgánicos, cuestan menos de 90 pesitos, están bien ricas y estoy segura que te van a encantar.